Cómo me acuerdo en estos momentos de mi Rocío Jurado cuando cantaba “Como una ola”, porque estamos en plena segunda ola del COVID, según dice el comité de expertos, y la semana pasada se aprobó el Anteproyecto de Ley de los Presupuestos Generales del Estado para 2021, que marca el inicio de una tercera ola de subida generalizada de impuestos.
Los Presupuestos contemplan un incremento de los ingresos públicos del 14,7% como consecuencia del aumento de los ingresos tributarios en un 13%. Repasemos, impuesto a impuesto, como llegaremos a ese 13%.
Por lo que respecta al Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas, se incrementa el gravamen de la base general del impuesto en dos puntos porcentuales, a partir de los 300.000 euros; y de la base del ahorro, en tres puntos, a partir de los 200.000 euros. Esta medida solo afectará a 36.000 contribuyentes, el 0,17% de los existentes.
También se penaliza el ahorro de cara la jubilación, al revisarse a la baja las reducciones por aportaciones a planes de pensiones individuales o de empleo, de 8.000 a 2.000 euros; aunque también hay que indicar que el límite conjunto, aportaciones del partícipe y de la empresa, se incrementa, pasando de 8.000 a 10.000 euros, intentando, de este modo, fomentar las aportaciones por parte de las empresas.
En cuanto al Impuesto sobre el Patrimonio, extraordinario en origen, que posteriormente desapareció y volvió a aparecer, ahora definitivamente dormirá con nosotros, ya que se establece su vigencia de manera indefinida. Además, para el último tramo de la escala de gravamen estatal, a partir de 10.695.996,06 euros, por cada 1.000.000 euros que se incremente su patrimonio, habrá que tributar 35.000 euros (3,5%) en vez de los 2,5%, que se tributaba hasta 2020.La cuestión es que aquellas Comunidades Autónomas que tengan escala de gravamen propia no se verán afectados por esta modificación y, en concreto, la Comunidad Valenciana no prevé subida de impuestos para 2021 en sus Presupuestos.
En este punto la Sra. Ministra avisa de una cuarta ola: existe la intención de armonizar este impuesto en todo el territorio nacional. Glupp!!
Por lo que respecta a la imposición indirecta, el I.V.A., se incrementa el tipo aplicable a las bebidas azucaras y edulcoradas, que pasan del 10% al 21%. Ahora bien, este incremento sólo afecta a la venta en tiendas. En los bares y restaurantes, el tipo seguirá siendo del 10%.
En esta categoría se incluirán bebidas que aparentemente no contienen azúcar, pero que sí están edulcoradas, como los productos Zero. Con esta medida los asiduos a gimnasios pagarán al fisco unos 400 millones de euros, que es lo que se espera recaudar.
Otra subida inesperada, la del Impuesto sobre las Primas de Seguro, que pasa del 6% al 8%; y esperada, la del Impuesto sobre Hidrocarburos, que pretende acercar la tributación del diésel a la gasolina. En ambos casos afectará a todos los consumidores de pie.
Para el Impuesto sobre Sociedades, una de las medidas estrella de estos presupuestos: convertir la exención plena de los dividendos y plusvalías derivadas de la venta de acciones y participaciones en una exención parcial del 95%.
El objetivo de esta medida, tal y como recoge la exposición de motivos de la Ley del Impuesto sobre Sociedades, era crear “un mecanismo de indudable relevancia para favorecer la competitividad y la internacionalización de las empresas españolas.” Y a partir de ahora, vuelta a la doble imposición.
Para que el golpe no sea tan duro, el Anteproyecto prevé que las empresas con un volumen de negocio inferior a 40 millones podrán seguir aplicando la exención del 100% por dividendos durante los próximos tres años.
Esto no se acaba, hay más, porque no todas las medidas fiscales se reflejan en el Anteproyecto, sino que se tramitan en otras leyes, al tratarse de figuras fiscales nuevas de carácter medioambiental o que gravan nuevas áreas de negocio:
- Impuesto sobre los envases de plástico no reutilizables, cuyo objetivo es reducir la generación de residuos plásticos.
- Impuesto estatal sobre residuos, que penalizará las opciones de gestión de residuos menos sostenibles, el depósito en vertedero y la incineración.
- Impuesto sobre Determinados Servicios Digitales, y el Impuesto sobre Transacciones Financieras.
“Como una ola tu amor llegó a mi vida Como una ola de fuego y de caricias De espuma blanca y rumor de caracolas Como una ola…”. Seguiremos de cerca la tramitación de los Presupuestos
